La piel del perro
La piel del
perro es la primera barrera defensiva que tienen nuestras mascotas.
A lo largo de
este artículo quiero subrayar y matizar los motivos por los cuales los
veterinarios, y especialmente los peluqueros caninos, hacemos tanto hincapié en
el correcto cuidado del pelo de los animales.
Como ya he dicho, la piel es la primera defensa que tienen los animales
(también los humanos), para proteger al organismo del entorno.
Y como todos
sabemos, el estudio de la piel, el pelo y de sus funciones se conoce como
Dermatología.
Vamos a
presentar primero la anatomía básica de la piel.
La piel es una
membrana flexible que cubre la superficie completa del animal. Representa
aproximadamente el 12-24% del peso de un individuo, y es por lo tanto el órgano
de mayor tamaño del cuerpo.
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La Epidermis
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La Dermis
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La Hipodermis
La Epidermis es la capa externa, que está en contacto con el exterior y está formada por células con alto contenido en queratina.
La queratina,
como muchos habréis escuchado del ámbito del hombre, es una sustancia orgánica
que forma la base de la epidermis, como hemos mencionado, de las uñas y del
pelo.
La Epidermis
es una capa que se renueva aproximadamente cada 21 días, motivo por el cual
cuando nuestro perro tiene una herida externa y superficial cura de forma mucho
más rápida que una interna.
Es la capa
menos sensible y la más dura de la piel del perro. Esto explica por qué cuando
cepillamos a nuestro perro y le quitamos los nudos no sufre tanto como cuando
nosotros nos quitamos enredos del pelo. Sus neurotransmisores sensitivos apenas
se encuentran en esta capa de la piel, por lo tanto aunque muchos perros ladren
durante el cepillado, probablemente no sea por dolor, sino más bien porque no
les gusta ser cepillados, o no están acostumbrados al manejo.
La Dermis es la capa debajo de la Epidermis. Tiene un grosor mayor al de la Epidermis, y es probablemente la capa más importante de la piel. En ella encontramos vasos sanguíneos, vasos linfáticos, nervios, glándulas sebáceas y sudoríparas y folículos pilosos, es decir, los pelos.
A pesar de que
los perros no tengan la capacidad de sudar a través de la piel, no significa
que no dispongan de células sudoríparas.
La secreción
de la glándula sudorípara del perro es insuficiente para producir sudor,
exceptuando la zona de las almohadillas, dónde estas glándulas tienen una
naturaleza diferente.
Las glándulas
sebáceas, son las células productoras de grasa. Éstas dan estabilidad al pelo y
le dan el aspecto sano y brillante al pelaje. Muchas alteraciones
dermatológicas se deben a la alteración de estas glándulas.
La Hipodermis, es la capa más interna de la piel y está compuesta principalmente por tejido graso. Dependiendo de la raza esta capa es más o menos gruesa.
La piel no
sólo tiene una función protectora para el organismo. Nos aporta muchos otros
beneficios:
- Activación de la Vitamina D por los rayos solares sobre la piel. Se absorbe por la piel y de esta forma llega a nivel intestinal dónde se metaboliza.
- Es una ‘depuradora’, que ayuda a eliminar toxinas y a que el perro ‘sude’ o elimine el calor.
- Actúa como almacén para vitaminas, proteínas, grasas…
- Mantiene el equilibrio del agua en el interior del cuerpo.
- Ayuda a regular la temperatura del organismo (la dilatación o constricción de los vasos sanguíneos).
- Al igual que el dicho dice que los ojos sin el espejo del alma, el pelo es el espejo del cuerpo, es decir, muchas veces las enfermedades o el estado de salud del perro se puede ver en su pelo y en su piel. Si el pelo del animal está mal, probablemente esté sufriendo una enfermedad o no esté en correcto estado nutricional o de salud.
- Es el primer receptor de estímulos (frío, calor, dolor, picor…)
Dado que son
funciones importantes para el organismo, es igual de importante cuidar el pelo
y la piel de nuestras mascotas.
Baños con los
productos correctos para permitir la correcta transpiración de la piel,
cepillados rutinarios con los cepillos adecuados para eliminar el polvo de la
superficie de la piel, una dieta correcta es importante para el buen
mantenimiento de la piel y del pelo, una desparasitación interna y externa son
esenciales para preservar el buen estado externo e interno de los animales…
El pelo, es el
aislamiento térmico que protege a la piel de lesiones físicas y/o químicas. El
pelo crece en la epidermis queratinizada. Por lo tanto no está ligada a los
receptores del dolor.
El pelo está
compuesto por un filamento elástico, formado prácticamente en su totalidad por
una sustancia proteíca conocida como ‘queratina’.
Hay dos tipos
de pelos, el pelo protector, que es
el externo y más áspero, el que vemos en nuestros animales y acariciamos que
protege la piel, y el pelo secundario,
que es más suave y fino y forma la capa interna, denominada ‘subpelo’. No obstante, no todas las
razas poseen ambos tipo s de pelo. Dependiendo de la raza tienen unas u otras
características, principalmente debido a la temperatura externa.
La muda es un
proceso fisiológico, en el cual los animales cambian el pelaje para adaptarse
mejor a las exigencias ambientales y climatológicas. Dura entre tres semanas y
mes y medio aproximadamente. No obstante, depende de la temperatura, y del
fotoperiodo, es decir, de la relación entre las horas de luz solar y las de
oscuridad. Actualmente, alteramos a menudo el proceso natural de la muda con
luz artificial, calefacción en los hogares, aires acondicionados…
2 Comentarios:
Bien explicado y preciso.
Excelente nota
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